EDUCACIÓN FINANCIERA, LO QUE SE PERSIGUE

 Serie: Educación Financiera (1)

Cuando hablamos de Educación Financiera, estamos hablando de un amplio espectro de aspectos y conceptos. En general, se pretende aprender y/o enseñar a administrar adecuadamente el dinero, hasta el punto de lograr la autosuficiencia financiera que, a la vez, nos dé libertad personal para el disfrute de las cosas de la vida que más nos gusten y apasionen. Significa, mantener un flujo de caja que permita satisfacer, de forma inmediata, las principales necesidades, sin mayores preocupaciones. En diferentes grados, una persona en esas condiciones, es una persona con poder financiero; es, por tanto, dinámica económicamente también, porque es capaz de utilizar el dinero para atraer más dinero.

De forma particular, lo anterior está referido al empoderamiento financiero; sin embargo, también existe un aspecto social muy marcado. Los expertos también hablan de empoderar financieramente a sectores particulares de la población, como, por ejemplo, empoderar a los jóvenes, a los mayores, a los enfermos o a las mujeres. En cada contexto, significa autosuficiencia. Estos sectores concretos de la sociedad suelen depender de otras clases activas y con ingresos para satisfacer sus necesidades monetarias. En el mundo de la economía, hablar de capacitar financieramente a estos grupos especiales, significa que se debe trabajar para lograr que, en la medida de lo posible, puedan ser autosuficientes y no dependan de otros, persiguiendo con ello, darles la seguridad de su valía y su lugar real en la sociedad.

No obstante lo anterior, en estos artículos nos limitaremos a la capacitación financiera individual; tratemos sobre cómo, un individuo, que puede ser el lector, puede ser autosuficiente con relación al dinero; es una sensación realmente fascinante, no tener que depender de nadie para sus necesidades financieras, lo que no todo el mundo puede hacer, pero que, haciendo determinadas acciones de forma correcta, es muy posible lograrlo.

Las soluciones que trataremos en nuestra serie, son simples, pero es en la implementación de las mismas donde se ve su verdadero valor; esto es lo más importante a tener en cuenta. Ninguna técnica de empoderamiento financiero tiene valor alguno a menos que se implementen, es en ese momento cuando nos percatamos de su valor; cada enfoque debe ir acompañado de acciones precisas para su eficacia.

En nuestros próximos artículos, revelaremos algunos conceptos tocantes al empoderamiento financiero, para que usted pueda comprender dichos aspectos y cómo hacerlos funcionar para usted.